La Iglesia Católica Romana, de acuerdo con el Calendario General Romano, celebra en Viernes, 2021-10-01 lo siguiente:
Lectura del libro de Isaías 66, 10-14c
Festejad a Jerusalén, gozad con ella, todos los que la amáis, alegraos de su alegría, los que por ella llevasteis luto. Mamaréis a sus pechos y os saciaréis de sus consuelos, y apuraréis las delicias de sus ubres abundantes. Porque así dice el Señor: «Yo haré derivar hacia ella, como un río, la paz, como un torrente en crecida, las riquezas de las naciones. Llevarán en brazos a sus criaturas y sobre las rodillas las acariciarán;como a un niño a quien su madre consuela, así os consolaré yo, y en Jerusalén seréis consolados. Al verlo, se alegrará vuestro corazón, y vuestros huesos florecerán como un prado;la mano del Señor se manifestará a sus siervos.»
Salmo responsorial Sal 130, 1. 2. 3
R. Guarda mi alma en la paz, junto a ti, Señor.
Señor, mi corazón no es ambicioso, ni mis ojos altaneros;no pretendo grandezas
que superan mi capacidad. R.
Sino que acallo y modero mis deseos, como un niño en brazos de su madre. R.
Espere Israel en el Señor ahora y por siempre. R.
Aleluya Cf. Mt 11, 25
Bendito seas, Padre, Señor de cielo y tierra, porque has revelado los secretos del
reino a la gente sencilla.
Lectura del santo evangelio según san Mateo 18, 1-4
En aquel momento, se acercaron los discípulos a Jesús y le preguntaron: -«¿Quién es el más importante en el reino de los cielos?» Él llamó a un niño, lo puso en medio y dijo: -«Os aseguro que, si no volvéis a ser como niños, no entraréis en el reino de los cielos. Por tanto, el que se haga pequeño como este niño, ése es el más grande en el reino de los cielos.»
Lectura del Profeta Baruc 1, 15-22
Confesamos que el Señor nuestro Dios es justo, nosotros en cambio, sentimos la
vergüenza de la culpa en este día: judíos, vecinos de Jerusalén, nuestros reyes y
gobernantes, nuestros sacerdotes y profetas y nuestros antepasados;porque
pecamos contra el Señor no haciéndole caso, desobedecimos al Señor nuestro
Dios no siguiendo los mandatos que el Señor nos había propuesto.
Desde el día en que el Señor sacó a nuestros padres de Egipto hasta hoy, no hemos
hecho caso al Señor nuestro Dios, hemos rehusado obedecerle.
Por eso nos han sucedido ahora las desgracias y la maldición que el Señor conminó
a Moisés cuando sacó a nuestros padres de Egipto, para darnos una tierra que
mana leche y miel.
No obedecimos al Señor que nos hablaba por medio de sus enviados los profetas;
todos seguimos nuestros malos deseos sirviendo a dioses ajenos y haciendo lo
que el Señor nuestro Dios reprueba.
Salmo responsorial Sal 78, 1-2. 3-5. 8. 9
V/. Por el honor de tu nombre, sálvanos, Señor.
R/. Por el honor de tu nombre, sálvanos, Señor.
Dios mío, los gentiles han entrado en tu heredad, han profanado tu santo
templo, han reducido Jerusalén a ruinas;echaron los cadáveres de tus siervos en
pasto a las aves del cielo, y la carne de tus fieles a las fieras de la tierra. R/.
V/. Derramaron su sangre como agua en torno a Jerusalén, y nadie la enterraba.
Fuimos el escarnio de nuestros vecinos, la irrisión y la burla de los que nos rodean.
¿Hasta cuándo, Señor? ¿Vas a estar siempre enojado? ¿Va a arder como fuego tu
cólera? R/.
No recuerdes contra nosotros las culpas de nuestros padres;que tu
compasión nos alcance pronto, pues estamos agotados. R/.
Socórrenos, Dios, Salvador nuestro, por el honor de tu nombre;líbranos y
perdona nuestros pecados, a causa de tu nombre. R/.
Lectura del santo Evangelio según San Lucas 10, 13-16
En aquel tiempo, dijo Jesús:
¡Ay de ti Corozaín, ay de ti, Betsaida! Si en Tiro y en Sidón se hubieran hecho los
milagros que en vosotras, hace tiempo que se habrían convertido, vestidos de
sayal y sentados en la ceniza.
Por eso el juicio les será más llevadero a Tiro y a Sidón que a vosotras.
Y tú, Cafarnaún, ¿piensas escalar el cielo? Bajarás al abismo.
Quien a vosotros os escucha, a mí me escucha;quien a vosotros os rechaza, a mí me
rechaza;y quien me rechaza a mí, rechaza al que me ha enviado.