La Iglesia Católica Romana, de acuerdo con el Calendario General Romano, celebra en Domingo, 2021-04-25 lo siguiente:
Lectura de la primera carta del apóstol san Pedro 5, 5b-14
Queridos hermanos: Tened sentimientos de humildad unos con otros, porque Dios resiste a los soberbios, pero da su gracia a los humildes. Inclinaos, pues, bajo la mano poderosa de Dios, para que, a su tiempo, os ensalce. Descargad en él todo vuestro agobio, que él se interesa por vosotros. Sed sobrios, estad alerta, que vuestro enemigo, el diablo, como león rugiente, ronda buscando a quién devorar. Resistidle firmes en la fe, sabiendo que vuestros hermanos en el mundo entero pasan por los mismos sufrimientos. Tras un breve padecer, el mismo Dios, de toda gracia, que os ha llamado en Cristo a su eterna gloria, os restablecerá, os afianzará, os robustecerá. Suyo es el poder por los siglos. Amén. Os he escrito esta breve carta por mano de Silvano, al que tengo por hermano fiel, para exhortaros y atestiguaros que ésta es la verdadera gracia de Dios. Manteneos en ella. Os saluda la comunidad de Babilonia, y también Marcos, mi hijo. Saludaos entre vosotros con el beso del amor fraterno. Paz a todos vosotros, los cristianos.
Salmo responsorial Sal 88, 2-3. 6-7. 16-17 (R.: cf. 2a)
R. Cantaré eternamente tus misericordias, Señor (O bien: Aleluya).
Cantaré eternamente las misericordias del Señor, anunciaré tu fidelidad por todas las edades. Porque dije: «Tu misericordia es un edificio eterno, más que el cielo has afianzado tu fidelidad.» R.
El cielo proclama tus maravillas, Señor, y tu fidelidad, en la asamblea de los ángeles. ¿Quién sobre las nubes se compara a Dios? ¿Quién como el Señor entre los seres divinos? R.
Dichoso el pueblo que sabe aclamarte: caminará, oh Señor, a la luz de tu rostro;tu nombre es su gozo cada día, tu justicia es su orgullo. R.
Aleluya 1 Co 1, 23-24
Nosotros predicamos a Cristo crucificado, fuerza de Dios y sabiduría de Dios.
Lectura del santo evangelio según san Marcos 16, 15-20
En aquel tiempo, se apareció Jesús a los Once y les dijo: -«Id al mundo entero y proclamad el Evangelio a toda la creación. El que crea y se bautice se salvará;el que se resista a creer será condenado. A los que crean, les acompañarán estos signos: echarán demonios en mi nombre, hablarán lenguas nuevas, cogerán serpientes en sus manos y, si beben un veneno mortal, no les hará daño. Impondrán las manos a los enfermos, y quedarán sanos.» Después de hablarles, el Señor Jesús subió al cielo y se sentó a la derecha de Dios. Ellos se fueron a pregonar el Evangelio por todas partes, y el Señor cooperaba confirmando la palabra con las señales que los acompañaban.
Lectura del libro de los Hechos de los apóstoles 4, 8-12
En aquellos días, Pedro, lleno de Espíritu Santo, dijo:
—«Jefes del pueblo y ancianos: Porque le hemos hecho un favor a un enfermo,
nos interrogáis hoy para averiguar qué poder ha curado a ese hombre;pues, quede
bien claro a todos vosotros y a todo Israel que ha sido el nombre de Jesucristo
Nazareno, a quien vosotros crucificasteis y a quien Dios resucitó de entre los
muertos;por su nombre, se presenta éste sano ante vosotros.
Jesús es la piedra que desechasteis vosotros, los arquitectos, y que se ha
convertido en piedra angular;ningún otro puede salvar;bajo el cielo, no se nos ha
dado otro nombre que pueda salvarnos.»
Salmo responsorial Sal 117, 1 y 8-9. 21-23. 26 y 28-29
R/. La piedra que desecharon los arquitectos es ahora la piedra angular. (O bien: Aleluya.)
Dad gracias al Señor porque es bueno, porque es eterna su misericordia. Mejor es
refugiarse en el Señor que fiarse de los hombres, mejor es refugiarse en el Señor
que fiarse de los jefes. R/.
Te doy gracias porque me escuchaste y fuiste mi salvación. La piedra que
desecharon los arquitectos es ahora la piedra angular. Es el Señor quien lo la
hecho, ha sido un milagro patente. R/.
Bendito el que viene en nombre del Señor, os bendecimos desde la casa del Señor.
Tu eres mi Dios, te doy gracias;Dios mío, yo te ensalzo. Dad gracias al Señor
porque es bueno, porque es eterna su misericordia. R/.
Lectura de la primera carta del apóstol san Juan 3, 1-2
Queridos hermanos:
Mirad qué amor nos ha tenido el Padre para llamarnos hijos de Dios, pues ¡lo
somos! El mundo no nos conoce porque no le conoció a él.
Queridos, ahora somos hijos de Dios y aún no se ha manifestado lo que
seremos. Sabemos que, cuando él se manifieste, seremos semejantes a él, porque lo
veremos tal cual es.
Aleluya Jn 10, 14
Yo soy el buen Pastor
—dice el Señor—,
conozoco a mis ovejas, y las mías me conocen.
Lectura del santo evangelio según san Juan 10, 11-18
En aquel tiempo, dijo Jesús:
—«Yo soy el buen Pastor. El buen pastor da la vida por las ovejas;el asalariado,
que no es pastor ni dueño de las ovejas, ve venir al lobo, abandona las ovejas y
huye;y el lobo hace estrago y las dispersa;y es que a un asalariado no le importan
las ovejas.
Yo soy el buen Pastor, que conozco a las mías, y las mías me conocen, igual que
el Padre me conoce, y yo conozco al Padre;yo doy mi vida por las ovejas.
Tengo, además, otras ovejas que no son de este redil;también a ésas las tengo
que traer, y escucharán mi voz, y habrá un solo rebaño, un solo Pastor.
Por esto me ama el Padre, porque yo entrego mi vida para poder recuperarla.
Nadie me la quita, sino que yo la entrego libremente. Tengo poder para entregarla
y tengo poder para recuperarla: este mandato he recibido de mi Padre.»