La Iglesia Católica Romana, de acuerdo con el Calendario General Romano, celebra en Domingo, 2021-05-02 lo siguiente:
Lectura de la primera carta del apóstol san Juan 5, 1-5
Queridos hermanos: Todo el que cree que Jesús es el Cristo ha nacido de Dios;y todo el que ama a Dios que da el ser ama también al que ha nacido de él. En esto conocemos que amamos a los hijos de Dios: si amamos a Dios y cumplimos sus mandamientos. Pues en esto consiste el amor a Dios: en que guardemos sus mandamientos. Y sus mandamientos no son pesados, pues todo lo que ha nacido de Dios vence al mundo. Y lo que ha conseguido la victoria sobre el mundo es nuestra fe. ¿Quién es el que vence al mundo, sino el que cree que Jesús es el Hijo de Dios?
SALMO RESPONSORIAL Sal 36, 3-4. 5-6. 30-31 (R.: 30a)
R. La boca del justo expone la sabiduría (O bien: Aleluya).
Confía en el Señor y haz el bien, habita tu tierra y practica la lealtad;sea el Señor tu delicia, y él te dará lo que pide tu corazón. R.
Encomienda tu camino al Señor, confía en él, y él actuará: hará tu justicia como el amanecer, tu derecho como el mediodía. R.
La boca del justo expone la sabiduría, su lengua explica el derecho;porque lleva en el corazón la ley de su Dios, y sus pasos no vacilan. R.
Aleluya Mt 5, 10
Confía en el Señor y haz el bien, habita tu tierra y practica la lealtad;sea el Señor tu
delicia, y él te dará lo que pide tu corazón. R.
Encomienda tu camino al Señor, confía en él, y él actuará: hará tu justicia como el
amanecer, tu derecho como el mediodía. R.
La boca del justo expone la sabiduría, su lengua explica el derecho;porque lleva en
el corazón la ley de su Dios, y sus pasos no vacilan. R.
Dichosos los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los
cielos.
Lectura del santo evangelio según san Mateo 10, 22-25a
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: -«Todos os odiarán por mi nombre;el que persevere hasta el final se salvará. Cuando os persigan en una ciudad, huid a otra. Porque os aseguro que no terminaréis con las ciudades de Israel antes de que vuelva el Hijo del hombre. Un discípulo no es más que su maestro, ni un esclavo más que su amo;ya le basta al discípulo con ser como su maestro, y al esclavo como su amo. Si al dueño de casa lo han llamado Belzebú, ¡cuánto más a los criados!»
Lectura del libro de los Hechos de los apóstoles 9, 26-31
En aquellos días, llegado Pablo a Jerusalén, trataba de juntarse con los
discípulos, pero todos le tenían miedo, porque no se fiaban de que fuera realmente
discípulo. Entonces Bernabé se lo presentó a los apóstoles.
Saulo les contó cómo había visto al Señor en el camino, lo que le había dicho y
cómo en Damasco había predicado públicamente el nombre de Jesús.
Saulo se quedó con ellos y se movía libremente en Jerusalén, predicando
públicamente el nombre del Señor. Hablaba y discutía también con los judíos de
lengua griega, que se propusieron suprimirlo. Al enterarse los hermanos, lo
bajaron a Cesarea y lo enviaron a Tarso.
La Iglesia gozaba de paz en toda Judea, Galilea y Samaria. Se iba construyendo
y progresaba en la fidelidad al Señor, y se multiplicaba, animada por el Espíritu
Santo.
Salmo responsorial Sal 21, 26b-27. 28 y 30. 31-32 (R/.: 26a)
R/. El Señor es mi alabanza en la gran asamblea. (O bien: Aleluya.)
Cumpliré mis votos delante de sus fieles. Los desvalidos comerán hasta saciarse,
alabarán al Señor los que lo buscan: viva su corazón por siempre. R/.
Lo recordarán y volverán al Señor hasta de los confines del orbe;en su presencia se
postrarán las familias de los pueblos. Ante él se postrarán las cenizas de la
tumba, ante él se inclinarán los que bajan al polvo. R/.
Me hará vivir para él, mi descendencia le servirá, hablarán del Señor a la
generación futura, contarán su justicia al pueblo que ha de nacer: todo lo que
hizo el Señor. R/.
Lectura de la primera carta del apóstol san Juan 3, 18-24
Hijos míos, no amemos de palabra y de boca, sino de verdad y con obras.
En esto conoceremos que somos de la verdad y tranquilizaremos nuestra
conciencia ante él, en caso de que nos condene nuestra conciencia, pues Dios es
mayor que nuestra conciencia y conoce todo.
Queridos, si la conciencia no nos condena, tenemos plena confianza ante Dios.
Y cuanto pidamos lo recibimos de él, porque guardamos sus mandamientos y
hacemos lo que le agrada.
Y éste es su mandamiento: que creamos en el nombre de su Hijo, Jesucristo, y
que nos amemos unos a otros, tal como nos lo mandó.
Quien guarda sus mandamientos permanece en Dios, y Dios en él;en esto
conocemos que permanece en nosotros: por el Espíritu que nos dio.
Aleluya Jn 15, 4. 5b
Permaneced en mí, y yo en vosotros
—dice el Señor—;
el que permanece en mí da fruto abundante.
Lectura del santo evangelio según san Juan 15, 1-8
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
—«Yo soy la verdadera vid, y mi Padre es el labrador.
A todo sarmiento mío que no da fruto lo arranca, y a todo el que da fruto lo
poda, para que dé más fruto.
Vosotros ya estáis limpios por las palabras que os he hablado;permaneced en
mí, y yo en vosotros.
Como el sarmiento no puede dar fruto por sí, si no permanece en la vid, así
tampoco vosotros, si no permanecéis en mí.
Yo soy la vid, vosotros los sarmientos;el que permanece en mí y yo en él, ése
da fruto abundante;porque sin mí no podéis hacer nada.
Al que no permanece en mí lo tiran fuera, como el sarmiento, y se seca;luego
los recogen y los echan al fuego, y arden.
Si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid lo que
deseáis, y se realizará.
Con esto recibe gloria mi Padre, con que deis fruto abundante;así seréis
discípulos míos.»