La Iglesia Católica Romana, de acuerdo con el Calendario General Romano, celebra en Domingo, 2024-08-11 lo siguiente:
Flp 3, 8-14
Salmo Responsorial Sal 15, 1-2a y 5. 7-8. 11
Mt 19, 27-29
Lectura del primer libro de los Reyes 19, 4-8
En aquellos dias, Elias continuó por el desierto una jornada de camino, y, al
final, se sentó bajo una retama y se deseó la muerte:
—«¡Basta, Señor! ¡Quítame la vida, que yo no valgo más que mis padres!»
Se echó bajo la retama y se durmió. De pronto un ángel lo tocó y le dijo:
—«¡Levántate, come!»
Miró Elias, y vio a su cabecera un pan cocido sobre piedras y un jarro de agua.
Comió, bebió y se volvió a echar. Pero el ángel del Señor le volvió a tocar y le dijo:
—«¡Levántate, come!, que el camino es superior a tus fuerzas.»
Elías se levantó, comió y bebió, y, con la fuerza de aquel alimento, caminó
cuarenta días y cuarenta noches hasta el Horeb, el monte de Dios.
Salmo responsorial Sal 33, 2-3. 4-5. 6-7. 8-9 (R/.: 9a)
R/. Gustad y ved qué bueno es el Señor.
Bendigo al Señor en todo momento, su alabanza está siempre en mi boca; mi
alma se gloría en el Señor: que los humildes lo escuchen y se alegren. R/.
Proclamad conmigo la grandeza del Señor, ensalcemos juntos su nombre. Yo
consulté al Señor, y me respondió, me libró de todas mis ansias. R/.
Contempladlo, y quedaréis radiarntes, vuestro rostro no se avergonzará. Si el
afligido invoca al Señor, él lo escucha y lo salva de sus angustias. R/.
El ángel del Señor acampa en torno a sus fieles y los protege. Gustad y ved qué
bueno es el Señor, dichoso el que se acoge a él. R/.
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Efesios 4, 30-5, 2
Hermanos:
No pongáis triste al Espíritu Santo de Dios con que él os ha marcado para el día
de la liberación final.
Desterrad de vosotros la amargura, la ira, los enfados e insultos y toda la
maldad. Sed buenos, comprensivos, perdonándoos unos a otros como Dios os
perdonó en Cristo.
Sed imitadores de Dios, como hijos queridos, y vivid en el amor como Cristo os
amó y se entrego por nosotros a Dios como oblación y víctima de suave olor.
Aleluya Jn 6, 51
Yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo
—dice el Señor—;
el que coma de este pan vivirá para siempre.
Lectura del santo evangelio segun san Juan 6, 41-51
En aquel tiempo, los judíos criticaban a Jesús porque había dicho: «Yo soy el
pan bajado del cielo», y decían:
—«¿No es éste Jesús, el hijo de José? ¿No conocemos a su padre y a su madre?
¿Cómo dice ahora que ha bajado del cielo?»
Jesús tomó la palabra y les dijo:
—«No critiquéis. Nadie puede venir a mí, si no lo atrae el Padre que me ha
enviado.
Y yo lo resucitaré el último día.
Está escrito en los profetas: "Serán todos discípulos de Dios."
Todo el que escucha lo que dice el Padre y aprende viene a mí.
No es que nadie haya visto al Padre, a no ser el que procede de Dios: ése ha
visto al Padre.
Os lo aseguro: el que cree tiene vida eterna.
Yo soy el pan de la vida. Vuestros padres comieron en el desierto el maná y
murieron: éste es el pan que baja del cielo, para que el hombre coma de él y no
muera.
Yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo; el que coma de este pan vivirá para
siempre.
Y el pan que yo daré es mi carne para la vida del mundo.»