La Iglesia Católica Romana, de acuerdo con el Calendario General Romano, celebra en Domingo, 2019-11-10 lo siguiente:
Si 39, 6-11
Salmo Responsorial Sal 36, 3-4. 5-6. 30-31
Mt 16, 13-19
Lectura del segundo libro de los Macabeos 7, 1-2. 9-14
En aquellos días, arrestaron a siete hermanos con su madre. El rey los hizo azotar
con látigos y nervios para forzarlos a comer carne de cerdo, prohibida por la Ley.
Uno de ellos habló en nombre de los demás:
—«¿Qué pretendes sacar de nosotros? Estamos dispuestos a morir antes que
quebrantar la ley de nuestros padres.»
El segundo, estando para morir, dijo:
—«Tú, malvado, nos arrancas la vida presente;pero, cuando hayamos muerto por
su ley, el rey del universo nos resucitará para una vida eterna.»
Después se divertían con el tercero. Invitado a sacar la lengua, lo hizo en seguida, y
alargó las manos con gran valor. Y habló dignamente:
—«De Dios las recibí, y por sus leyes las desprecio;espero recobrarlas del mismo
Dios.»
El rey y su corte se asombraron del valor con que el joven despreciaba los
tormentos.
Cuando murió éste, torturaron de modo semejante al cuarto. Y, cuando estaba para
morir, dijo:
—«Vale la pena morir a manos de los hombres, cuando se espera que Dios mismo
nos resucitará. Tú, en cambio, no resucitarás para la vida.»
Salmo responsorial Sal 16, 1. 5-6. 8 y 15 (R.: l5b)
R. Al despertar me saciaré de tu semblante, Señor.
Señor, escucha mi apelación, atiende a mis clamores, presta oído a mi súplica, que
en mis labios no hay engaño. R.
Mis pies estuvieron firmes en tus caminos, y no vacilaron mis pasos. Yo te invoco
porque tú me respondes, Dios mío;inclina el oído y escucha mis palabras. R.
Guárdame como a las niñas de tus ojos, a la sombra de tus alas escóndeme. Yo con
mi apelación vengo a tu presencia, y al despertar me saciaré de tu semblante. R.
Lectura de la segunda carta del apóstol san Pablo a los Tesalonicenses 2, 16—3,5
Hermanos:
Que Jesucristo, nuestro Señor, y Dios, nuestro Padre, que nos ha amado tanto y nos
ha regalado un consuelo permanente y una gran esperanza, os consuele
internamente y os dé fuerza para toda clase de palabras y de obras buenas.
Por lo demás, hermanos, rezad por nosotros, para que la palabra de Dios siga el
avance glorioso que comenzó entre vosotros, y para que nos libre de los hombres
perversos y malvados, porque la fe no es de todos.
El Señor, que es fiel, os dará fuerzas y os librará del Maligno.
Por el Señor, estamos seguros de que ya cumplís y seguiréis cumpliendo todo lo
que os hemos enseñado.
Que el Señor dirija vuestro corazón, para que améis a Dios y tengáis la constancia
de Cristo.
Aleluya Ap 1, 5a y 6b
Jesucristo es el primogénito de entre los muertos;a él la gloria y el poder por los
siglos de los siglos.
Lectura del santo evangelio según san Lucas 20, 27-38
En aquel tiempo, se acercaron a Jesús unos saduceos, que niegan la resurrección, y le preguntaron:
—«Maestro, Moisés nos dejó escrito: Si a uno se le muere su hermano, dejando
mujer, pero sin hijos, cásese con la viuda y dé descendencia a su hermano. Pues
bien, había siete hermanos: el primero se casó y murió sin hijos. Y el segundo y el
tercero se casaron con ella, y así los siete murieron sin dejar hijos. Por último murió
la mujer. Cuando llegue la resurrección, ¿de cuál de ellos será la mujer? Porque los siete han estado casados con e11a.»
Jesús les contestó:
—«En esta vida, hombres y mujeres se casan;pero los que sean juzgados dignos de
la vida futura y de la resurrección de entre los muertos no se casarán. Pues ya no
pueden morir, son como ángeles;son hijos de Dios, porque participan en la resurrección.
Y que resucitan los muertos, el mismo Moisés lo indica en el episodio de la zarza,
cuando llama al Señor "Dios de Abrahán, Dios de Isaac, Dios de Jacob". No es Dios de muertos, sino de vivos;porque para él todos están vivos.»