La Iglesia Católica Romana, de acuerdo con el Calendario General Romano, celebra en Lunes, 2022-07-04 lo siguiente:
1 Jn 3, 14-18
Salmo Responsorial Sal 111, 1-2. 3-4. 5-7a. 7b-8. 9
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos 8, 26-30
Hermanos: El Espíritu viene en ayuda de nuestra debilidad, porque nosotros no sabemos pedir lo que nos conviene, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos inefables. Y el que escudriña los corazones sabe cuál es el deseo del Espíritu, y que su intercesión por los santos es según Dios. Sabemos también que a los que aman a Dios todo les sirve para el bien: a los que ha llamado conforme a su designio. A los que había escogido, Dios los predestinó a ser imagen de su Hijo, para que él fuera el primogénito de muchos hermanos. A los que predestinó, los llamó;a los que llamó, los justificó;a los que justificó, los glorificó. Palabra de Dios.
versículo antes del evangelio Mt 5, 3
Dichosos los pobres en el espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos.
Lectura del santo evangelio según san Mateo 5, 1-12a
En aquel tiempo, al ver Jesús el gentío, subió a la montaña, se sentó, y se acercaron sus discípulos;y él se puso a hablar, enseñándoles: -«Dichosos los pobres en el espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos. Dichosos los que lloran, porque ellos serán consolados. Dichosos los sufridos, porque ellos heredarán la tierra. Dichosos los que tienen hambre y sed de la justicia, porque ellos quedarán saciados. Dichosos los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia. Dichosos los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios. Dichosos los que trabajan por la paz, porque ellos se llamarán los Hijos de Dios. Dichosos los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos. Dichosos vosotros cuando os insulten y os persigan y os calumnien de cualquier modo por mi causa. Estad alegres y contentos, porque vuestra recompensa será grande en el cielo.» Palabra del Señor.
Lectura del Profeta Oseas 2, 14. 15-16. 19-20
Esto dice el Señor: Yo la cortejaré, me la llevaré al desierto, le hablaré al corazón.
Y me responderá allí como en los días de su juventud, como el día en que la saqué
de Egipto.
Aquel día oráculo del Señor me llamará «Esposo mío» , no me llamará «Ídolo mío».
Me casaré contigo en matrimonio perpetuo;me casaré contigo en derecho y justicia.
en misericordia y compasión;me casaré contigo en fidelidad, y te penetrarás del
Señor.
Salmo responsorial Sal 144, 2-3. 4-5. 6-7. 8-9
V/. El Señor es clemente y misericordioso.
R/. El Señor es clemente y misericordioso.
V/. Día tras día te bendeciré y alabaré tu nombre por siempre jamás.
Grande es el Señor y merece toda alabanza, es incalculable su grandeza.
V/. Una generación pondera tus obras a la otra;y le cuenta tus hazañas;alaban
ellos la gloria de tu majestad, y yo repito tus maravillas. R/.
Encarecen ellos tus temibles proezas, y yo narro tus grandes acciones;
difunden la memoria de tu inmensa bondad, y aclaman tus victorias. R/.
V/. El Señor es clemente y misericordioso, lento a la cólera y rico en piedad;el
Señor es bueno con todos, es cariñoso con todas sus criaturas. R/.
Lectura del santo Evangelio según San Mateo 9, 18-26
En aquel tiempo, mientras Jesús hablaba, se acercó un personaje que se arrodilló
ante él y le dijo: Mi hija acaba de morir.
Pero ven tú, ponle la mano en la cabeza, y vivirá.
Jesús lo siguió con sus discípulos.
Entretanto, una mujer que sufría flujos de sangre desde hacía doce años, se le acercó
por detrás y le tocó el borde del manto, pensando que con sólo tocarle el manto
se curaría.
Jesús se volvió, y al verla le dijo: ¡Animo, hija! Tu fe te ha curado.
Y en aquel momento quedó curada la mujer.
Jesús llegó a casa del personaje y, al ver a los flautistas y el alboroto de la gente,
dijo: ¡Fuera! La niña no está muerta, está dormida. Se reían de él.
Cuando echaron a la gente, entró él, cogió a la niña de la mano, y ella se puso en
pie.
La noticia se divulgó por toda aquella comarca.