La Iglesia Católica Romana, de acuerdo con el Calendario General Romano, celebra en Domingo, 2024-09-29 lo siguiente:
Lectura de la profecía de Daniel 7, 9-10. 13-14
Durante la visión, vi que colocaban unos tronos, y un anciano se sentó; su vestido era blanco como nieve, su cabellera como lana limpísima; su trono, llamas de fuego; sus ruedas, llamaradas. Un río impetuoso de fuego brotaba delante de él. Miles y miles le servían, millones estaban a sus órdenes. Comenzó la sesión y se abrieron los libros.
Mientras miraba, en la visión nocturna vi venir en las nubes del cielo como un hijo de hombre, que se acercó al anciano y se presentó ante él.
Le dieron poder real y dominio; todos los pueblos, naciones y lenguas lo respetarán. Su dominio es eterno y no pasa, su reino no tendrá fin.
Palabra de Dios.
SALMO RESPONSORIAL Sal 137, 1-2a. 2b-3. 4-5. 7c-8 (R.: 1c)
R. Delante de los ángeles tañeré para ti, Señor.
Te doy gracias, Señor, de todo corazón;
delante de los ángeles tañeré para ti,
me postraré hacia tu santuario. R.
Daré gracias a tu nombre: por tu misericordia y tu lealtad, porque tu promesa
supera a tu fama; cuando te invoqué, me escuchaste, acreciste el valor en mi alma.
R.
Que te den gracias, Señor, los reyes de la tierra, al escuchar el oráculo de tu boca;
canten los caminos del Señor, porque la gloria del Señor es grande. R.
Aleluya Sal 102, 21
Bendecid al Señor, ejércitos suyos, servidores que cumplís sus deseos.
Lectura del santo evangelio según san Juan 1, 47-51
En aquel tiempo, vio Jesús que se acercaba Natanael y dijo de él: -«Ahí tenéis a un israelita de verdad, en quien no hay engaño.» Natanael le contesta: -«¿De qué me conoces?» Jesús le responde: -«Antes de que Felipe te llamara, cuando estabas debajo de la higuera, te vi.» Natanael respondió: -«Rabí, tú eres el Hijo de Dios, tú eres el Rey de Israel.» Jesús le contestó: -«¿Por haberte dicho que te vi debajo de la higuera, crees? Has de ver cosas mayores.» Y le añadió: -«Yo os aseguro: veréis el cielo abierto y a los ángeles de Dios subir y bajar sobre el Hijo del hombre.»
Lectura del libro de los Números 11, 25-29
En aquellos días, el Señor bajó en la nube, habló con Moisés y, apartando algo
del espíritu que poseía, se lo pasó a los setenta ancianos. Al posarse sobre ellos el
espíritu, se pusieron a profetizar en seguida.
Habían quedado en el campamento dos del grupo, llamados Eldad y Medad.
Aunque estaban en la lista, no habían acudido a la tienda. Pero el espíritu se posó
sobre ellos, y se pusieron a profetizar en el campamento.
Un muchacho corrió a contárselo a Moisés:
—«Eldad y Medad están profetizando en el campamento.»
Josué, hijo de Nun, ayudante de Moisés desde joven, intervino:
—«Señor mio, Moisés, prohíbeselo.»
Moisés le respondió:
—«¿Estás celoso de mí? ¡Ojalá todo el pueblo del Señor fuera profeta y recibiera
el espíritu del Señor!»
Salmo responsorial Sal 18, 8. 10.12-13.14 (R/.: 9a)
R/. Los mandatos del Señor son rectos y alegran el corazón.
La ley del Señor es perfecta y es descanso del alma; el precepto del Señor es fiel
e instruye al ignorante. R/.
La voluntad del Señor es pura y eternamente estable; los mandamientos del
Señor son verdaderos y enteramente justos. R/.
Aunque tu siervo vigila para guardarlos con cuidado, ¿quién conoce sus faltas?
Absuélveme de lo que se me oculta. R/.
Preserva a tu siervo de la arrogancia, para que no me domine: así quedaré libre
e inocente del gran pecado. R/.
Lectura de la carta del apóstol Santiago 5, 1-6
Ahora, vosotros, los ricos, llorad y lamentaos por las desgracias que os han
tocado.
Vuestra riqueza está corrompida y vuestros vestidos están apolillados. Vuestro
oro y vuestra plata están herrumbrados, y esa herrumbre será un testimonio contra
vosotros y devorará vuestra carne como el fuego.
¡Habéis amontonado riqueza, precisamente ahora, en el tiempo final!
El jornal defraudado a los obreros que han cosechado vuestros campos está
clamando contra vosotros; y los gritos de los segadores han llegado hasta el oído
del Señor de los ejércitos.
Habéis vivido en este mundo con lujo y entregados al placer. Os habéis cebado
para el día de la matanza. Condenasteis y matasteis al justo; él no os resiste.
Aleluya Jn 17, 17b. a
Tu palabra, Señor, es verdad; conságranos en la verdad.
Lectura del santo evangelio segun san Marcos 9, 38-43. 45. 47-48
En aquel tiempo, dijo Juan a Jesús:
—«Maestro, hemos visto a uno que echaba demonios en tu nombre, y se lo
hemos querido impedir, porque no es de los nuestros.»
Jesús respondió:
—«No se lo impidáis, porque uno que hace milagros en mi nombre no puede
luego hablar mal de mí. El que no está contra nosotros está a favor nuestro.
Y, además, el que os dé a beber un vaso de agua, porque seguís al Mesías, os
aseguro que no se quedará sin recompensa. El que escandalice a uno de estos
pequeñuelos que crcen, más le valdría que le encajasen en el cuello una piedra de
molino y lo echasen al mar. Si tu mano te hace caer, córtatela: más te vale entrar
manco en la vida, que ir con las dos manos al infierno, al fuego que no se apaga.
Y, si tu pie te hace caer, córtatelo: más te vale entrar cojo en la vida, que ser
echado con los dos pies al infierno.
Y, si tu ojo te hace caer, sácatelo: más te vale entrar tuerto en el reino de Dios,
que ser echado con los dos ojos al infierno, donde el gusano no muere y el fuego no
se apaga.»