La Iglesia Católica Romana, de acuerdo con el Calendario General Romano, celebra en Domingo, 2019-11-17 lo siguiente:
1 Jn 3, 14-18
Salmo Responsorial Sal 33, 2-3. 4-5. 6-7. 8-9. 10-11
Lc 6, 27-38
Lectura de la profecía de Malaquías 3, 19-20a
Mirad que llega el día, ardiente como un horno:
malvados y perversos serán la paja, y los quemaré el día que ha de venir
—dice el Señor de los ejércitos—, y no quedará de ellos ni rama ni raíz.
Pero a los que honran mi nombre los iluminará un sol de justicia que lleva la salud
en las alas.
Salmo responsorial Sal 97, 5-6. 7-9a. 9bc (R.: cf. 9)
R. El Señor llega para regir los pueblos con rectitud.
Tañed la cítara para el Señor, suenen los instrumentos: con clarines y al son de
trompetas, aclamad al Rey y Señor. R.
Retumbe el mar y cuanto contiene, la tierra y cuantos la habitan;aplaudan los ríos,
aclamen los montes al Señor, que llega para regir la tierra. R.
Regirá el orbe con justicia y los pueblos con rectitud. R.
Lectura de la segunda carta del apóstol san Pablo a los Tesalonicenses 3, 7-12
Hermanos:
Ya sabéis como tenéis que imitar nuestro ejemplo: no vivimos entre vosotros sin
trabajar, nadie nos dio de balde el pan que comimos, sino que trabajamos y nos
cansamos día y noche, a fin de no ser carga para nadie.
No es que no tuviésemos derecho para hacerlo, pero quisimos daros un ejemplo
que imitar.
Cuando vivimos con vosotros os lo mandamos: El que no trabaja, que no coma.
Porque nos hemos enterado de que algunos viven sin trabajar, muy ocupados en no
hacer nada.
Pues a esos les mandamos y recomendamos, por el Señor Jesucristo, que trabajen
con tranquilidad para ganarse el pan.
Aleluya Lc 21, 28
Levantaos, alzad la cabeza: se acerca vuestra liberación.
Lectura del santo evangelio según san Lucas 21, 5-19
En aquel tiempo, algunos ponderaban la belleza del templo, por la calidad de la
piedra y los exvotos. Jesús les dijo:
—«Esto que contempláis, llegará un día en que no quedará piedra sobre piedra:
todo será destruido.»
Ellos le preguntaron:
—«Maestro, ¿cuándo va a ser eso?, ¿y cuál será la señal de que todo eso está para
suceder?»
Él contestó:
—«Cuidado con que nadie os engañe. Porque muchos vendrán usurpando mi
nombre, diciendo: "Yo soy", o bien: "El momento está cerca";no vayáis tras ellos.
Cuando oigáis noticias de guerras y de revoluciones, no tengáis pánico.
Porque eso tiene que ocurrir primero, pero el final no vendrá en seguida.»
Luego les dijo:
—«Se alzará pueblo contra pueblo y reino contra reino, habrá grandes terremotos, y
en diversos países epidemias y hambre.
Habrá también espantos y grandes signos en el cielo.
Pero antes de todo eso os echarán mano, os perseguirán, entregándoos a las
sinagogas y a la cárcel, y os harán comparecer ante reyes y gobernadores, por causa
mía. Así tendréis ocasión de dar testimonio.
Haced propósito de no preparar vuestra defensa, porque yo os daré palabras y
sabiduría a las que no podrá hacer frente ni contradecir ningún adversario vuestro.
Y hasta vuestros padres, y parientes, y hermanos, y amigos os traicionarán, y
matarán a algunos de vosotros, y todos os odiarán por causa mia.
Pero ni un cabello de vuestra cabeza perecerá;con vuestra perseverancia salvaréis
vuestras almas.»