La Iglesia Católica Romana, de acuerdo con el Calendario General Romano, celebra en Martes, 2019-10-01 lo siguiente:
Lectura del libro de Isaías 66, 10-14c
Festejad a Jerusalén, gozad con ella, todos los que la amáis, alegraos de su alegría, los que por ella llevasteis luto. Mamaréis a sus pechos y os saciaréis de sus consuelos, y apuraréis las delicias de sus ubres abundantes. Porque así dice el Señor: «Yo haré derivar hacia ella, como un río, la paz, como un torrente en crecida, las riquezas de las naciones. Llevarán en brazos a sus criaturas y sobre las rodillas las acariciarán;como a un niño a quien su madre consuela, así os consolaré yo, y en Jerusalén seréis consolados. Al verlo, se alegrará vuestro corazón, y vuestros huesos florecerán como un prado;la mano del Señor se manifestará a sus siervos.»
Salmo responsorial Sal 130, 1. 2. 3
R. Guarda mi alma en la paz, junto a ti, Señor.
Señor, mi corazón no es ambicioso, ni mis ojos altaneros;no pretendo grandezas
que superan mi capacidad. R.
Sino que acallo y modero mis deseos, como un niño en brazos de su madre. R.
Espere Israel en el Señor ahora y por siempre. R.
Aleluya Cf. Mt 11, 25
Bendito seas, Padre, Señor de cielo y tierra, porque has revelado los secretos del
reino a la gente sencilla.
Lectura del santo evangelio según san Mateo 18, 1-4
En aquel momento, se acercaron los discípulos a Jesús y le preguntaron: -«¿Quién es el más importante en el reino de los cielos?» Él llamó a un niño, lo puso en medio y dijo: -«Os aseguro que, si no volvéis a ser como niños, no entraréis en el reino de los cielos. Por tanto, el que se haga pequeño como este niño, ése es el más grande en el reino de los cielos.»
Lectura del Profeta Zacarías 8, 20-23
Así dice el Señor de los Ejércitos: Todavía vendrán pueblos y habitantes de grandes
ciudades, y los de una ciudad Irán a otra diciendo: Vayamos a implorar al Señor,
a consultar al Señor de los Ejércitos.
Yo también voy contigo.
Y vendrán pueblos incontables y numerosas naciones a consultar al Señor de los
Ejércitos en Jerusalén y a implorar su protección.
Así dice el Señor de los Ejércitos: Aquel día diez hombres de cada lengua extranjera
agarrarán a un judío por la orla del manto, diciendo: Queremos ir con vosotros,
pues hemos oído que Dios está con vosotros.
Salmo responsorial Sal 86, 1-3. 4-5. 6-7.
V/. Dios está con nosotros.
R/. Dios está con nosotros.
V/. El la ha cimentado sobre el monte santo: y el Señor prefiere las puertas de
Sión a todas las moradas de Jacob.
¡Qué pregón tan glorioso para ti, ciudad de Dios ! . R/.
V/. «Contaré a Egipto y a Babilonia entre mis fieles;filisteos, tirios y etíopes han
nacido allí».
Se dirá de Sión: «Uno por uno todos han nacido en ella: el Altísimo en persona la ha
fundado». R/.
V/. El Señor escribirá en el registro de los pueblos: «Este ha nacido allí».
Y cantarán mientras danzan: «Todas mis fuentes están en ti». R/.
Lectura del santo Evangelio según San Lucas 9, 51-56
Cuando se iba cumpliendo el tiempo de ser llevado al cielo, Jesús tomó la decisión
de ir a Jerusalén.
Y envió mensajeros por delante.
De camino entraron en una aldea de Samaria para prepararle alojamiento.
Pero no lo recibieron, porque se dirigía a Jerusalén.
Al ver esto, Santiago y Juan, discípulos suyos, le preguntaron: Señor, ¿quieres que
mandemos bajar fuego del cielo y acabe con ellos? El se volvió y les regañó, y
dijo: No sabéis de qué espíritu sois. Porque el Hijo del Hombre no ha venido a
perder a los hombres, sino a salvarlos.
Y se marcharon a otra aldea.